Miccionando que es gerundio

Han vuelto los maravillosos reconocimientos médicos a mi empresa. Yo me he librado porque los hacen cada dos años y a mí me lo hicieron el año pasado...¿resultado? estoy sana como una manzana o al menos el año pasado lo estaba.

Hoy en la hora de la comida mientras abríamos nuestros respectivos tuppers, me dice mi compañero J.M:

- Mo, ¿te han mandado el e-mail con la cita para el reconocimiento médico?

(Es que en mi empresa todo va a base de e-mails, eso sí, con copia hasta al Espíritu Santo).

- No, yo me lo hice el año pasado.

 - A mí me lo han mandado - dice J.M.- lo tengo el miercoles.

Pasa la horita de la comida y nos reincorporamos a nuestro puesto de trabajo, y al ratín me dirijo hasta el sitio de J.M., ya que tenía que darle unos documentos.

Mientras voy andando me lo veo de espaldas a mí, mirando algo que tenía sujeto con las manos a cinco centímetros de los ojos. Desde mi perspectiva no logré ver lo que era, sólo advertí que era algo que estaba dentro de un plástico transparente.

Como nos han mandado un mail (con copia al Espíritu Santo) informándonos de que tenemos que hacer unos cursos y que para algunos de ellos necesitamos auriculares que estarían a nuestra disposición en Recursos Humanos, pensé: uff ya ha ido éste a por los auriculares, vaya que se acaben y no haya para él!!!.

Es que mi compi J.M. es lo que podríamos decir "mu' apretao pa' tó'".

Me acerco.. y veo que lo que tiene en sus manos no son los auriculares sino el botecito para la muestra de orina de los análisis que tenía que hacerse, y lo oigo que está leyendo algo en voz alta...

- ".... debe tomar la muestra en la mitad de la micción ..." 

Y lo veo con cara de flipado... mirándo a su alrededor a ver si alguien le descifraba la frase.

No lo interrumpí de sus divagaciones, le dejé la documentación encima de la mesa, y volví hacia mi sitio riendome.

- Mo, ¿de qué te ries? - me dice mi compañera de al lado.

- Tía, que está ahí J.M emparanoiado con el tarrito del análisis de orina, leyendo las indicaciones que vienen en el plastiquito y se ha quedado loco cuando ha leído que tiene que recoger la muestra en el mitad de la micción.

- Pero este tío ¿no se ha hecho un análisis de orina en su vida? (risas)

- Yo que sé!! 

(más risas)

- Es capaz de llenar el tarro hasta arriba de pipí

(carcajadas)

- Y como no le quepa todo el pis en el tarrito coge una botella vacía de agua y echa el resto y le dice al médico que coja la mitad de la micción que quiera!!

(lagrimones de risa).

Pobre J.M.!! y menos mal que el análisis es de pipí, que si llega a ser de popó no quiero ni imaginarme el dilema que tendría!!!!